El domingo 27 de julio participamos en el ExtremeMan de Riaza (Segovia) sobre las distancias habituales en los triatlones de media distancia (1,9-90-21). A este triatlón ya hacía unos cuantos meses que nos habíamos inscrito. Íbamos a acudir toda la plana mayor del CABTRI y para ello nos estábamos preparando, pero los últimos acontecimientos acaecidos hicieron que la preparación durante el último mes anterior a Riaza fuera bastante mala.
Hasta tierras segovianas nos desplazamos, Iván, Pepe, Torsten, Tirapu, Tena (Sariñena), yo y los lesionados Tom y Yago convalecientes todavía de su grave accidente. Cada uno de nosotros con sus objetivos perfilados, el día anterior lo dedicamos a preparar el material en las dos zonas de transición, la T1 con las cosas para pedalear y la T2 con las de correr.
El pantano donde se nadaba, de aguas oscuras, no demasiado frías, estaba situado cerca del pueblo de Majaelrayo donde hace unos años se rodó el anuncio donde salía un hombre mayor que preguntaba aquello de: "Y Franco, que opina de esto?... Y el Madrid, qué, otra vez campeón de Europa?". El circuito de bici, muy duro, un continuo sube y baja, que recorría los "pueblos rojos" por la característica tonalidad de sus paredes exteriores. La carrera a pie era por las inmediaciones de Riaza y la llegada en la plaza del pueblo, plaza circular que también es utilizada como plaza de toros.
Hizo mucho calor y la carrera estuvo durilla. Todos conseguimos terminar y quedamos contentos porque, no nos ahogamos, no nos caímos con la bicicleta y corrimos lo que pudimos. Por la noche nos dimos un homenaje con cochinillo asado y todos coincidimos en que había sido un fin de semana muy majo y que habría que repetir.
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La representación del CAB en la plaza de Riaza |
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Preparados para comenzar |
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La tozudez aragonesa pudo con la mecánica alemana |
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En Riaza (Segovia) |